La forma en que nos hablamos cada día a nosotros mismos tiene un gran impacto en nuestro comportamiento. Esta semana, mientras se concentra en practicar el hábito de moverse durante todo el día, ponga sus intenciones en palabras:

3. El hábito de moverse durante todo el día

Me centraré en moverme durante todo el día. Mi cuerpo nunca fue concebido para sentarse y observar a los demás ser activos y disfrutar de sus vidas. No soy un espectador. Voy a moverme para sentir el flujo sanguíneo, para que mi corazón lata con fuerza, para que mi mente piense con claridad. Voy a buscar amigos con los que pueda pasear y disfrutar de las maravillas de la naturaleza y el calor humano de la amistad. Hoy, voy a moverme para sentir la esencia de mi vida.

Durante esta semana, prométase cada mañana:

Voy a moverme y valorar la energía de
mi fuerza de vida

Su enfoque esta semana:
el hábito de moverse durante todo el día.

Esta semana, concéntrese en aumentar su nivel de actividad –una de las estrategias más importantes que le ayudarán a disminuir la glucosa en sangre. Observe cómo incluso un simple paseo de media hora puede hacer que se sienta mejor, física y mentalmente. Cada movimiento cuenta, así que estírese en su escritorio, párese cada media hora cuando esté haciendo algo sedentario, camine enérgicamente con los amigos, baile, trabaje en el jardín o haga una visita adicional al gimnasio. Incluso limpiar un armario puede ser divertido cuando se da cuenta de que con cada movimiento está mejorando su circulación, quemando calorías y mejorando tanto su estado de ánimo como la claridad mental mediante el bombeo de más sangre a su cerebro.